Seguro que tú también lo has notado. Cada vez más ofertas de empleo incluyen detalles como estos en la parte de descripción de la empresa:
🍒 Fruta fresca todos los días.
⚽ Futbolín en la oficina..
✅ Gimnasio gratis.
¿Qué está pasando? ¿Se han vuelto locas las empresas? 🤷♀️
Pues no. Aunque a algunas personas les parezca raro, estas iniciativas (bien planteadas) suelen ser parte de un programa de wellness o de bienestar corporativo.
Pero, ojo, porque hay una diferencia muuuuy grande entre crear un programa de bienestar (efectivo) y comprar un futbolín para la sala de descanso.
Así que hoy vamos a ver qué es exactamente un programa de wellbeing y te enseñaremos los pasos para que puedas crear uno realmente efectivo, ¡vamos allá!
Qué es un programa de bienestar o wellbeing
Un programa de bienestar corporativo agrupa una serie de iniciativas que promueven la salud física y mental del equipo humano de una empresa.
El objetivo de este tipo de programas es contribuir a crear un entorno saludable, positivo y favorable al desarrollo de cada persona para que pueda alcanzar su máximo potencial en todos los aspectos.
Los programas de bienestar laboral no son algo nuevo, pero ahora se están generalizando porque pueden tener un gran impacto en el clima laboral, la productividad, el absentismo, la fidelización y la atracción de talento.
Algunas de las acciones más habituales en los programas de wellbeing son:
Horarios de entrada flexible, servicios de guardería y otras medidas para conciliar la vida personal y laboral.
Acceso a gimnasios, actividades deportivas o clases de yoga.
Opciones de comida saludable en la cafetería o el comedor.
Acceso a servicios médicos, de nutrición o atención psicológica.
Formación (en temáticas relacionadas con el puesto de trabajo o no).
Adaptación de los espacios de trabajo para mejorar la comunicación y la productividad.
Actividades sociales para fomentar las relaciones dentro del entorno de trabajo.
Incentivos para el uso de transporte público o de la bicicleta.
Retos y actividades de difusión para promover hábitos de vida saludable (como caminar, beber más agua o practicar deporte).
La lista podría seguir casi hasta el infinito, porque el concepto de bienestar es muy amplio, por eso tendrás que entender muy bien qué necesita la gente que trabaja en tu empresa antes de empezar a promover acciones al "tún-tún".
El bienestar físico es importante y es la que siempre se ha cuidado más por parte de las empresas, pero no podemos quedarnos solo ahí.
En realidad, el bienestar abarca 8 ámbitos o dimensiones que forman la "rueda del bienestar":
Físico
Mental
Emocional
Relacional
Recreacional
Ambiental
Espiritual
Financiero
Cómo crear un programa de bienestar corporativo paso a paso
Es probable que desde tu empresa ya estéis promoviendo el bienestar del equipo de diferentes maneras, pero tal vez no contáis con un programa de bienestar establecido.
Si quieres empezar ahora, estos son los pasos:
1. Define las necesidades y establece unos objetivos que beneficien a la empresa y al equipo
El plan de bienestar debe responder a la situación concreta de tu compañía.
Por eso el primer paso debería ser analizar la situación de partida y determinar qué aspectos merecen especial atención.
¿De dónde sacas esta información?
Lo primero sería analizar las métricas del departamento de Personas (absentismo, fidelización, productividad, satisfacción…) . Pero, como los números no lo son todo, también te aconsejamos consultar con managers y empleados/as o crear encuestas para tener un panorama completo, con datos cualitativos.
Además, si involucras al equipo desde el inicio, el plan de bienestar será mejor recibido. Algo que puede ayudarte mucho es crear un comité específico para el diseño y ejecución de este plan, proponiendo que en él participen de forma voluntaria empleados/as de diferentes departamentos (además del área de Personas).
Los programas de wellbeing deberían ser parte de la estrategia de atracción y fidelización de la empresa y no solo un parche para reaccionar a situaciones puntuales. Saltarse esta primera fase de análisis puede hacer que el plan de bienestar no responda a la verdadera situación de la compañía.
2. Define las acciones
Una vez que tienes la información de base, llega el momento de planear acciones.
Sabemos que hay mil opciones y puede ser difícil decidir.
En este punto, es importante asegurar que el programa de bienestar esté en coherencia con las necesidades de los empleados, los objetivos de la empresa y que también vaya en línea con tu marca empleadora.
3. Comunica tu programa de bienestar corporativo dentro y fuera de la compañía
Las personas que integran la compañía son las primeras interesadas en conocer los beneficios de tu plan de bienestar corporativo.
Además es importante que el concepto de bienestar se traslade a todos y se integre dentro de la estrategia de la empresa, porque de otra forma el plan puede parecer solo un parche y se perderá el interés.
No te olvides de que también puede ser una baza a la hora de atraer talento que se sienta motivado por poder disfrutar de un plan como este en su empresa.
Por eso, una vez que el plan esté en marcha, no te olvides de integrar este dato en tus procesos de selección y de comunicarlo en tu página de empleo y redes sociales para contárselo al mundo, ya que además de atraer talento mejorará tu employer branding.
4. Establece un sistema para medir la efectividad de tu plan
Ofrece opciones a los/as empleados/as para comunicar qué les parecen las acciones del programa de bienestar (encuestas, buzones de sugerencia, entrevistas…).
Por otro lado, ten siempre presentes los objetivos que planteaste y las métricas que analizaste al inicio de este proceso, como la productividad o la satisfacción de tus equipos.
5. Actualiza y mejora
Pasado un tiempo, tendrás información suficiente para valorar tu plan y determinar qué acciones han sido más efectivas. Seguro que alguna de las iniciativas han tenido mayor impacto que otras, ¡es normal!
Una vez sepas esto, tendrás que identificar el por qué ha funcionado una iniciativa bien o mal y tomar medidas, o bien para mejorarla y que tenga un impacto real en el bienestar de los empleados o incluso, si fuese necesario, para quitarla.
En cualquier caso, recuerda que la mejora del bienestar es una apuesta a medio y largo plazo. Las campañas de corta duración tienen un impacto limitado para el equipo y para la empresa, por lo que date tiempo y aprovecha para ir mejorándolo poco a poco.
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